CORAZONES DE HELIO

- Deconstruyendo San Valentín  -


COLLAGE DIGITAL POR MELISA FALCÓN

Adoro la escena en la que Mr. Darcy le confiesa a Elizabeth todo su amor bajo la lluvia. La Bella y la Bestia es mi película animada favorita de Disney - y mi musical favorito, y la película que protagonizará Emma Watson también lo será, probablemente. Quiero, desesperadamente que Quinn y Carrie de Homeland estén, por fin, juntos luchando cuerpo a cuerpo contra Abu Nazir. Me alegré cuando Ted Mosby encontró a "la madre" y, cuando Sheldon besó por primera vez a Amy. Me fascinan las novelas de Isabel Allende y shippeo mucho - demasiado- a Johnlock (Sherlock Holmes y John Watson). Me encanta imaginar que mi vida es un poco como Downton Abbey, con un amor furtivo entre la niña de clase alta y el chofer, como Lady Sybil y Tom Branson
Por lejos, mi escena favorita de la serie Girls es cuando Adam va corriendo hasta la casa de Hannah, la alza en brazos, y le dice "I´ve always been here". Jon Snow e Ygritte, es decir, OMG. ¿Hace falta que diga algo?(Inserte aquí un emoticón de corazones en los ojos y otro de baba por Jon Snow). Y, por si todo esto fuera poco, mis cantantes favoritos son Ed Sheeran y Adele. Sí, Adele. "Never mind  I´ll find someone like you", Adele. Extremadamente lacrimógeno.


La verdad, es que así podría seguir por horas y horas. Por mucho que he intentado estar enojada con San Valentín, no puedo. No me sale. No estoy furiosa ni dramáticamente triste al borde del llanto desconsolado por estar... chan chan chan ¡¡Solteraaa!!. Creo más bien, que si alguna vez me molestó o incomodó, fue más porque el resto del mundo pensó que debería incomodarme. Quiero decir, estás sola, el día de los enamorados, rodeada de todos estos globos hermosos de colores subnormales y cupcakes con formitas de perritos de ojitos tiernos... DEBERÍAS ESTAR SINTIÉNDOTE MUUY TRISTE. Deberías estar arrastrándote por el piso, cantándole a tus infortunios canciones melancólicas de Les Misérables, del estilo "On my own, pretending he´s beside me". Era una obligación que me sintiera triste. Pero, ¿saben qué?. ¡Yo me rehusé a eso!


Sí, porque cuando de San Valentín se trata, pareciera que sólo hay dos opciones. O bien lo celebrás empalagosamente o, lo criticás furiosamente como si no hubiera un mañana. 
Con el correr de los años, he descubierto una tercera opción: ¿Por qué no nos reímos un rato de San Valentín?

Por mucho tiempo, me empeñé en convencerme de que el Día de los Enamorados era, simplemente, "un día mas". Pero, ¡no!. No cometan ese error, ¡nunca! San Valentín, es el día en el que las heladerías vomitan gente por las puertas, el Rosedal es puro besos y mosquitos - sobre todo mosquitos- y en la placita de la vuelta de tu casa, las palomas no la pasaron nunca tan bien, haciendo caca sobre todos los miles de desprevenidos que se sientan a, bueno digamos, "charlar".

En la últimas décadas, San Valentín se convirtió más bien en el día en que estallan las redes sociales. Un Tsunami asesino de hashtags inunda tu inicio.  Primero, arranca tranqui. #ConElBichi #PicnicConMiGorda #BebeTeAmo #AngySosLoTodo. Pero después, ya se ceban mal, y terminás leyendo 140 caracteres de puro "puke rainbows".
#PichiCuchiLinditoMiamorGorduTeAmoMuchoCuchurrumin. Ok. ¡Awantiaaa!. 

El 14 de feberero, las frases "poemas cortos" y "frases de amor" fueron buscadas infinidad de veces en Google. Es más, según Google Trends, la palabra "Regalo" fue tendencia en búsquedas durante estos últimos 7 días consecutivos.  Los términos "comercio" y "Día de San Valentín", se escribieron juntas en por lo menos 200 artículos diferentes.

¿A que voy con todo esto? Bueno, a que como feminista que soy, no odio el amor. No soy una ermitaña, enojada con la vida que ha perdido todas las esperanzas. En realidad, estoy en contra de la idea del amor que trasmite San Valentín. Creo que es eso, lo que muchos otros y otras feministas han venido diciendo desde hace tiempo. 

Porque, por ejemplo, ¿cuántos de ustedes prestaron atención a la programación de películas para el día de hoy? ¿No les pareció que era en exceso, heterosexual y blanca? Porque a mí, sí. 
No quiero, honestamente, aburrirlos con el típico discurso feminista, pero en serio, ¿alguna vez se pusieron a reflexionar sobre la Industria de los Corazones de Helio?

A San Valentín, cuando lo vemos más allá de todo el dulzor de los regalos, las selfies en Instagram, los peluches que dicen "te amo" y demás, es un día, específicamente diseñado para promover estereotipos de mujer romántica - que vive esperando que le regalen joyas y le encanta atender al marido- y, de un hombre que todo lo puede, que está siempre ahí y que jamás se olvidaría de conmemorar una fecha de este tipo. Así como protesto cada vez que me dicen que el machismo sólo le afecta a las mujeres y, yo les digo que no, que el machismo también promueve estereotipos de hombres, de igual forma, pienso que ocurre así en el día de los enamorados. Kate Miller, feminista y activista, resumió en una frase, lo que la industria del amor ha hecho con las imágenes del hombre y la mujer: "Mientras nosotras amábamos, los hombres gobernaban"

Mi visión, es que no es que el amor sea algo malo en sí. No creo eso ni por un segundo y, más allá de mis burlas, voy a darle like a cada una de esas publicaciones románticas que suban quienes me rodean. Lo que sí es malo, lo que sí rechazo totalmente, es la forma en la que se presenta ese amor.

La mitad de quienes me lean pensarán que soy una exagerada pero, en mi opinión - al menos desde el lugar que me compete, que es la comunicación-, es que tanto en redes sociales como en los medios tradicionales, el amor se representa estereotipado, sexista y poco diverso. Es una mirada inconclusa. Porque quienes estén o hayan estado en pareja, sabrán decirme, que de seguro, una relación, no es para nada como una típica comedia romántica.

Mi opinión acerca de toda esta cuestión del bebé que dispara flechas, es que estoy 100% convencida de que es posible contar historias de amor de una manera radicalmente diferente. (¡Dijo radical! Es porque es una feminaziii... ¡feminista radical exxtremaa!) 
No, en serio, es posible entender la idea del amor desde otro lugar. Hablando de personas diferentes, que se mueven en ámbitos diversos y poco convencionales, personas con visiones sobre la sexualidad, el género y la identidad que no se ajusten a los parámetros del rancio patriarcado. (Ok, cuando empiezo a usar muchas palabras de este estilo, me doy cuenta que es tiempo de parar. Nótese que me abstuve de decir "capítalismo" en lo que va del artículo. Nada mal para una estudiante de sociales ¿no?. Pd: Aguante Marx coff coff)

El 14 de febrero la gente desespera, Tinder registra 200 millones de nuevos usuarios que machean furiosamente, los negocios lucran y las feministas nos cansamos de ser contrahegemónicas.

El 15 de febrero, ya es otra la historia. Los globitos de helio se habrán desinflado y la Crazy Zombie Lovers Walk habrá dejado de aterrorizar Palermo pero, algunos de nosotros seguiremos peleándonos con el mundo para ver otra realidad. Visiones alternativas al amor como hoy lo entendemos, para sentir que, en realidad, no estoy adentro de una gran caja aterciopelada de bombones de chocolate y que, en cualquier momento, a mi también me va a tocar romper el celofán y salir al mundo a sonreírle al patriarcado.  Porque, yo voy a seguir pataleando e indignándome con cada nota que se titule "Encontrá a tu media naranja", "Atención Solteros, tenemos lo que buscás", "Sorprende a tu hombre". Lo lamento, así soy.

En fin, ¡Feliz Día de San Valentín! 


¡Bazinga!





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